Distintas dimensiones de la observación
Cualquier esfuerzo personal que
intentemos en la dirección del desarrollo de más habilidades de
observación tratará los distintos tipos y aspectos de esta capacidad de
manera integral - abarcando todas las dimensiones - y después de cierto
nivel de autoconocimiento.
La observación puede ser clasificada en:
Pasiva: observamos lo que nos
estimula. El nombre nuestro pronunciado claramente. Sólo observamos lo
diferente.
Reactiva: observamos lo conocido. La observación del especialista
(conocido por tender a las anteojeras). Sólo tratamos con experiencias
similares a las que conocemos de antemano.
Activa: observamos la observación. La observación educada. La observación
más sistemática, lúcida e inteligente, que podamos lograr.
Distintas dimensiones de la observación
Las distintas dimensiones de la
observación son:
-
La dimensión práctica y la dimensión
ética. La dimensión práctica y ética
consiste en captar las mejores opciones o alternativas de acción. En
general, los individuos que compiten (en cualquier área) afinan y
desarrollan esta capacidad para percibir movimientos, cambios y
resultados. La experiencia, la inteligencia, el sentido común y las
estrategias no podrían aprovecharse si no percibiéramos cuál es la
alternativa de acción más satisfactoria.
-
La dimensión nueva y la dimensión
estética. Es la intención aplicada en captar
desde perspectivas diferentes y con mayor cantidad de matices. Si tenemos
la capacidad de observar desde más perspectivas no es tan difícil producir
ideas nuevas. Si sabemos cómo estimular la
observación es posible alcanzar las combinaciones más originales y una
estética más atractiva o aceptable.
-
La dimensión reflexiva y la dimensión
metódica. Es la intención aplicada en captar
las mejores razones, motivos y justificaciones para las alternativas
disponibles, posibles y adoptadas.
Elegir entre las mejores:
Estrategias
Técnicas
Métodos
Procedimientos
Instrumentos
Herramientas
Fórmulas
que percibamos y podamos planteamos con la
intención de observar con mas potencia y precisión.
Lo obvio. (Es habitual pasarlo por
alto)
Lo explícito. (Es habitual que oculte a lo implícito)
Lo implícito. (Es habitual que afecte a lo explícito)
Habilidades complementarias
Es muy importante tener en cuenta que la capacidad de observación se apoya
en habilidades y recursos complementarios:
-
Intención: Determina la curiosidad; la
intensidad del esfuerzo y la orientación del mismo. Sin intención de
observar no observas muchas cosas importantes.
-
Análisis: Influye en la precisión y la
captación de componentes diferenciados. Sin análisis no solemos comprender
las complejidades que observamos.
-
Síntesis: Define la percepción; la
emoción; la intuición; la razón y el valor. Sin síntesis no sabríamos qué
hacer con lo observado
-
Organización: Influye en los esquemas;
las causas; las secuencias; las jerarquías; la disposición espacial; las
estructuras; los planes de acción; las directivas; las dinámicas y las
estrategias. Sin organización no captamos coherencia ni constancia en lo
observado.
-
Comparación: Define los contrastes; el
discernimiento de igualdades; semejanzas y diferencias; las valoraciones;
las clasificaciones y las decisiones. Sin comparación no podemos evaluar
lo observado.
-
Voluntad: Determina la perseverancia;
la paciencia; la tolerancia; el autodominio; la firmeza; la capacidad de
arriesgar; la disciplina. Sin voluntad no observamos, sólo vemos lo que se
impone pero no lo observamos.
Patricio Vargas Gil
patriciovargas@mentat.com.ar
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Última modificación de la página:01/04/2008
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