Los "niveles saltados"

Una forma obvia de avanzar en cualquier proceso es de un paso a la vez. Sin embargo, uno de los errores principales en la actividad intelectual es hacer by pass, saltearse etapas necesarias en la información.

Por ver un ejemplo, y sin buscar mucho, podemos hallar fácilmente personas que creen poder entender a Nietzsche aunque confiesen no saber bien de qué hablaban los filósofos griegos. En todo caso, lo que entiendan es altamente probable que no les sirva en una mesa de examen o para dialogar coherentemente con quien haya seguido un orden más acertado en sus lecturas.

En materias humanísticas es más fácil autoengañarse, saltearse niveles y llevar la pretensión al extremo. Por el contrario, difícilmente alguien pretenda saber resolver ecuaciones avanzadas si no conoce más que la matemática elemental. No obstante ello, el principio al que aludimos opera en ambos casos.

Los niveles bien llevados significan que te mueves de un paso a la vez. No hay otra manera correcta de hacerlo.

Cuando estudiamos algo por niveles adecuados, cada paso se da para incluir un poco más que el paso previo. Y cada paso será más difícil o requerirá más de nosotros. Si seguimos todos los pasos alcanzaremos el nivel de habilidad y realización que deseamos.

Esto aplica principalmente a las habilidades prácticas, pero - como hemos visto más arriba - también al estudio teórico. Si deseamos aprender a conducir barcos el principio de los niveles adecuados trabaja de la misma manera que si deseamos ser neurocirujanos, filósofos o ingenieros.

El problema muchas veces consiste en que los temas no se presentan siempre de manera gradual. En algunos libros de textos parece que se asume que ya sabes algo del tema y se te abruma con información, sin consideración alguna hacia el orden de presentación.

También, pueden faltarte los materiales que realmente necesitas. Ejemplo: necesitas el manual básico y sólo cuentas con la fotocopia de cinco capítulos de un texto avanzado.
Si estudias algo en un nivel demasiado elevado la confusión te golpeará y te aplastará, inevitablemente. Es como intentar conducir un jet sin ninguna introducción. Se altera el orden y se altera el tiempo: sentirías que las cosas se están moviendo demasiado rápido.

Por otra parte, sin notarlo, todos podemos ir al paso siguiente sin dominar el que estaba antes. El nivel saltado se manifiesta por una sensación confusa, una sensación de enredo. La causa no es el paso que estamos mirando, el que nos afecta así es el que nos salteamos.

La solución a los niveles saltados es tan simple como retroceder y hallar el nivel o etapa saltado, dominarlo completamente y avanzar siempre de a una etapa a la vez.

Recuerda esto: puedes lograr cualquier cosa si realmente puedes representarte mentalmente a los pasos desde donde estás ahora hacia donde deseas ir y si después puedes seguir los pasos uno por uno. Podemos hacer las cosas mucho más fáciles seleccionando una ruta de estudio con una evolución manejable de niveles y etapas. De ello siempre podemos hacernos cargo, y sin esperar que el texto o el profesor lo haga.

Patricio Jorge Vargas Gil
patriciovargas@mentat.com.ar

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