¿Y tú que diablos sabes?: Los memes del escepticismo
,Imagínate este escenario. Un astrófísico famoso, un verdadero showman mimado por los medios, respondiendo preguntas del público en una conferencia (este evento está en Youtube).
Alguien del público le pregunta al científico famoso “¿CREES EN LOS OVNIS?”.
Podrías esperar que el científico responda un rotundo NO, pero en vez de ello responde como si en realidad le hubiesen preguntado – “HE VISTO UN OVNI ¿QUÉ OPINAS?” .
Parece la misma pregunta pero la diferencia es importante.
El científico podría responder si CREE o NO CREE en los OVNIS pero en cambio responde elocuentemente lo que opina de quienes dicen haber visto un ovni o tener una experiencia similar.
El argumento que plantea se puede resumir en:
a) Dado que la visión no es fiable, y
b) dado que el cerebro suele fallar al procesar lo que ve, y
c) que la única evidencia válida para la ciencia es la evidencia física, y
d) que probablemente no sepas de lo que hablas (a causa de a y b)… Entonces,
e) no debes afirmar haber visto algo que no puedas probar, y como sólo el método científico es capaz de probar algo…
f) Cállate y regresa al sitio de donde has salido!
Teniendo en cuenta semejante respuesta a una pregunta no formulada, plantéate estas dos preguntas sencillas:
La primera: ¿Las opiniones de los científicos están siempre estrictamente limitadas a lo que pueden llevar en sus bolsillos? Sólo hay una respuesta válida: NO. En las disciplinas científicas las afirmaciones deben ajustarse a las evidencias y las experiencias repetibles por otros. Es su contexto y son las reglas para que la ciencia avance por un camino seguro. Pero no tiene sentido alguno trasladar el principio a toda situación fuera del laboratorio de la ciencia. Ni siquiera para ellos mismos tiene sentido semejante exigencia.
La segunda: Si los humanos únicamente pensáramos y comunicáramos ideas limitándonos a lo que pudiéramos probar físicamente, ¿habríamos sobrevivido como especie? Sólo hay una respuesta correcta: NO. Imagínate una noche oscura y a unos primitivos humanos refugiados en una cueva. En un momento dado, uno de ellos cree que percibió a un predador acechando muy cerca. Trata de alertar a sus compañeros pero no le creen porque no aportó alguna evidencia física… ¿Así es como sobrevivimos?
En conclusión…
- Si dices que viste algo es absurdo exigirte siempre que se trate de algo que puedas llevar en un bolso. Tu vida, tus percepciones y tu conciencia no forman parte de un experimento o investigación de laboratorio.
- Si te preguntan lo que crees, no estás obligado a escribir una monografía para Nature ni estás en inferioridad de condiciones por no llevar contigo un buen pedazo de lo que crees.
- El problema que tienes es el mismo que el del científico: no puedes determinar todos los fenómenos de tus experiencias… y el científico tampoco!
- También es VÁLIDA la sospecha de que determinados fenómenos que se observan te digan que no se observan y de que determinados fenómenos que no se observan te digan que sí se observan. Puedes considerarlo como posibilidad siempre que las investigaciones estén financiadas por intereses fuera del ámbito científico, por ejemplo.
Los aborígenes ya conocían las propiedades de muchísimas plantas antes de que la ciencia las descubriera. Sus afirmaciones acerca de las propiedades que creían percibir de las plantas seguramente no satisfacen los estándares de evidencia de la ciencia. ¿Pero acaso se supone que no tendrían que haber utilizado plantas hasta que apareciera un botánico en escena?
Cuando alguien sostiene que nadie puede afirmar que percibe algo a no ser que sea un científico especializado y/o lleve las evidencias consigo, a sabiendas o no, está apoyando dos ideas-memes de cuidado:
- la única verdad es la verdad científica
- los únicos en contacto con la verdad son los científicos
Notarás que no difiere mucho de lo que se le endilga a chamanes y sacerdotes: el tipo de relación entre conocimiento y privilegio.
Tal vez la sumisión y la confianza extrema en la ciencia no resulte mucho mejor que la sumisión y el fanatismo religioso; multiplican los mismos memes.
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